Has tiredness become your norm? Do you often feel weary? When you are facing challenges from different directions, it can wear you down. However, God does not want you to be weary.
Doing the will of God should not drain us. Jesus said, “…My yoke is easy and My burden is light…” (Matthew 11:30). Fulfilling your purpose should energize you, not exhaust you. Tiredness is more often an issue of your heart than your schedule.
If you’ve been feeling weary, these three steps will help.
- OFFLOAD
Matthew 11:28- says: “Come to me, all you who are weary and burdened, and I will give you rest.” When we are spent or flagging, Jesus says something like this, “Come and spend some time in My presence. Offload on Me and then I will fill you up afresh.”
If you’re weary, set some time aside to be with the Lord. Tell Him how you feel and what’s been weighing you down. Share your frustrations with God in prayer. Tell Him about any sadness or disappointments.
Then just linger for a while in His presence. Ask God to fill you afresh with His Spirit and revive you from the inside out. There’s no sweeter time to be replenished than when we are weary. He wants to breathe new life into your heart and refresh your soul.
- RESET
Galatians 6:9 says: “And let us not grow weary while doing good, for in due season we shall reap if we do not lose heart.” This verse tells us that weariness is (in part) a choice. After we have been refilled, we need to choose a different attitude
The second half of that verse in the amplified version says, “Do not loosen and relax your courage and faint.” We need to take courage and remind ourselves of His promises. Hope will build as you take your eyes off your circumstances and look to the Lord.
Get hold of God’s word and speak strength to yourself like Deborah did (see Judges 5:21). Say something like this: “My God is faithful and He will make a way where there seems to be no way, God’s highest plans and purposes for my life shall come to pass!”
- KEEP THE COURSE
This journey through life is a marathon, not a sprint. That’s why we need resilience. Once you have reminded yourself of God’s promises, return to the things that you know God has called you to do.
For example, read a chapter from the Bible, get back into that book, share your testimony, and send a word of encouragement to a friend. Do something that you know you are called to do. Doing the will of God always breathes life into our lives.
If you would like the Holy Spirit to rejuvenate you from the inside out, come to REFRESH in London (3rd Feb) or Miami (Feb 17th). The Lord will lift burdens that have been weighing you down and fill you afresh. Think of it like a spa day for your soul!
¿Se ha convertido el cansancio en su norma? ¿Se siente usted cansado a menudo? Cuando enfrenta desafíos desde diferentes direcciones, esto puede desgastarlo. Sin embargo, Dios no quiere que se canse.
Hacer la voluntad de Dios no debería agotarnos. Jesús dijo: “…Mi yugo es fácil y ligera mi carga…” (Mateo 11:30). Cumplir su propósito debería darle energía, no agotarlo. El cansancio es más a menudo una cuestión de su corazón que de su horario.
Si se ha sentido cansado, estos tres pasos le ayudarán.
- DESCARGAR
Mateo 11:28 dice: “Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os haré descansar”. Cuando estamos agotados o flaqueando, Jesús dice algo como esto: “Ven y pasa algún tiempo en Mi presencia. Descárgate de Mí y luego Yo te llenaré de nuevo”.
Si está cansado, reserve un tiempo para estar con el Señor. Dígale cómo se siente y qué lo ha estado agobiando. Comparta sus frustraciones con Dios en oración. Cuéntele cualquier tristeza o desilusión.
Luego quédese un rato en Su presencia. Pídale a Dios que lo llene de nuevo con Su Espíritu y lo reviva de adentro hacia afuera. No hay momento más dulce para reponer fuerzas que cuando estamos cansados. Él quiere insuflar nueva vida a su corazón y refrescar su alma.
- REINICIAR
Gálatas 6:9 dice: “Y no nos cansemos haciendo el bien, porque a su tiempo cosecharemos, si no desmayamos”. Este versículo nos dice que el cansancio es (en parte) una elección. Después de haber sido recargados, debemos elegir una actitud diferente.
La segunda mitad de ese versículo en versión amplificada dice: “No os canséis ni desmayéis”. Necesitamos animarnos y recordarnos sus promesas. Al apartar la vista de las circunstancias y mirar al Señor, la esperanza aumentará.
Aférrese a la palabra de Dios y hable con fuerza para si mismo como lo hizo Débora (ver Jueces 5:21). Diga algo como esto: “Mi Dios es fiel y Él abrirá un camino donde parece que no hay camino, ¡los planes y propósitos más elevados de Dios para mi vida se harán realidad!”
- MANTENGA EL CURSO
Este viaje por la vida es un maratón, no una carrera de velocidad. Por eso necesitamos resiliencia. Una vez que haya recordado las promesas de Dios, regrese a las cosas que sabe que Dios lo ha llamado a hacer.
Por ejemplo, lea un capítulo de la Biblia, vuelva a leer ese libro, comparta su testimonio, envíe una palabra de aliento a un amigo. Haga algo que sabe que está llamado a hacer. Hacer la voluntad de Dios siempre da vida a nuestras vidas.
Si desea que el Espíritu Santo lo rejuvenezca desde afuera, venga a REFRESH en Londres (3 de febrero) o Miami (17 de febrero). El Señor aliviará las cargas que lo han estado agobiando y lo llenará de nuevo. Piense en ello como un spa espiritual para su alma.